Cuando se ama, sin control,
recordarás siempre, con ternura,
cada experiencia que vivas,
no importa que dure lo de un beso.
Si controlas, creas resentimiento,
que difícilmente lo podrás quemar.
Ama a quien quieras y como quieras,
deja que cada quien sea.
Como es o quiere ser,
y si sólo te da un saludo o un beso,
si lo haces sin el celo de la posesión,
ese acto será puro,
y exclusivo para ti.
Si no lo haces, aún en la intimidad,
y aunque conscientemente,
la otra parte no se de cuenta,
y te hable con amor,
esas palabras, no son para ti.
Porque son palabras del alma,
y ésta, como el colibrí,
por su propia naturaleza,
es libre como el viento,
para ir y venir, en todas direcciones.
Entonces, él estará hablando
a tu ser físico,
y puede estar loco por el,
por tu desnudez,
pero su corazón y pensamiento íntimo,
no verbal, estará con ella,
la que vuela libre.
Y aunque te dio un beso y su cuerpo,
no te dio el alma,
porque ésta no se puede dar.
A pesar de mi, eso me enseñó la vida.
No puedes retener lo que no es tuyo,
lo que nunca te pertenece
ni te pertenecerá.
Por ello viva cada momento,
con entrega, de tu cuerpo,
de tus besos, de tus caricias,
efímeros como la flor más bella.
Solo se recuerda,
la flor íntima,
la flor del corazón.
EL POETA DEL AMOR. 03-03-13.
CABO SAN LUCAS, BCS. MÉXICO.