Bernardo Arzate Benítez

¡Un ciclo de armonía!

 

 

 

Moviéndose en el viento se halla la semilla,

diciendo adios al aire con su aroma,

sin temer que venga una avecilla,

se pare entre sus ramas y  la coma.

 

Después de comer, el ave canta,

como agradeciendo su comida;

después en un vuelo se levanta,

y va a la rama donde anida.

 

Autor:Bernardo Arzate