victor febo

SOLO

Ya no sé nada de tus besos,

pues los tiempos se los llevaron.

 

 

Ya tu sonrisa no existe,

porque algún día quise borrarla.

 

 

Y, cuando acaricio tus sonidos,

veo que te he perdido.

 

 

Sólo sentado tras la puerta,

espero tu regreso

y, de madrugada, me lamento.

 

 

Cuando tengo tus caricias,

viene el recuerdo y ya, no existes.

 

 

Veo venir el alba y aún no te encuentro.

 

 

No puedes ver como mi alma

se cubre de pena... y lloro.