(José Luis Agurto Zepeda y Luis Harold Agurto,
Domingo, Agosto 28 de 1988)
Es difícil saber dónde estás
que piensas, quien te pretende
quien en tu vida atiende
si te quedas o te vas.
Negros tus ojos y negra tu alma;
y negra esta situación que me aflige
al no saber a quién eliges...
esta obsesión rompe mi calma.
Es triste saber y no saber nada
saber que eres mi vida,
que mi alma se queda siempre fría,
entre tanto tú... ¿tienes tu vida forjada?
No sé... y quisiera saberlo,
si vives o como yo has muerto
al estar en esta vida incierto
quisiera tu presente, como el mío verlo.
Mas siempre callas y tú me huyes,
siempre me dejas con este pensamiento:
“Si tu amor me pertenece o se lo llevó el viento,
si eres laguna quieta o río que fluye.”