Lueve, y una ausencia que no culmina
no tiene nombre ni cara,
ni tiene deseos ni ganas de sentirte lejos.
Llueve y se moja mi silencio de lagrimas que no se enjuagan ,
de carencias de otros tiempos
cerrando un ciclo que se lleva el viento
y me deviuleve mi almohada.
llueve y yo busco el sol
busco el abrazo de mi padre,
el saber de mi abuelo
el perdon de mi conciencia.
LLueve y me escapo en arrolluelo
filtrando mi tristeza entre el barro y la conjoja,
entre el cielo y la tierra.