Cuándo me quedé
solo con tu dibujo
en mi libreta transcribida.
Cuándo fue que mis ojos
ya no clavaban en tu mirada.
Cuándo fue la mañana
que te llevó sin decir nada.
Cuándo... Cuándo!
Cuándo me quedé
más solo sin tu beldad
más solo de lo normal.
Cuándo empezó
a dolerme tanto
¡Cuando entendí por fin
que tú eras para mí!
Cuando fue tarde.
Y mírenme ahora
desbordando lágrimas
de sueños perdidos.
Bien lo merezco
por ser callado.
Oh...!
perdóname corazón
por dejarla ir
sin saber de mí
Oh...!
mis ojos no recisten