Estás en cada esquina de mi cuerpo
Entraste por la avenida de mi corazón,
de donde nacen “los te quiero”.
Te estacionaste en mi alma
de donde sale la poesía
que me inspira para ti.
Eres el verso que mi corazón me dicta
Amándote con la piel de mi alma.
-No pediste permiso para entrar -
Solo dejaste que me enamorara,
de tus poemas de amor,
de tus versos dedicados,
de tus letras apasionadas
-de tu filosofía de cómo se debe amar-
de tus cartas poéticas,
de tú amor que escondidas me acaricia
de tus palabras amorosas,
de tu mirada de niño coqueto,
de tu doctrina y enseñanzas,
¡De ti, sólo de ti, me enamoré!
Me fui por la calle de tus caricias
Y regresé amándote más.
y ya no había avenida
por donde regresar me quede
por tus manías
Y tú forma de amarme.
Me quede varada en tus labios
Y saboreé la miel de tu boca
Y quise más de ti.
después sentí tus manos
recorrer todo mi cuerpo
como guitarra abrazada
y las cuerdas sonaban “los te quiero”
como quieres que no te ame
si mi cuerpo te reclama
y mi piel húmeda te espera.
Recuerdo tu mirada
descubriendo mis pechos
y desear que te amante
como un ciervo sin dueño.
Beberás de mi cuerpo
por qué solo tú lo deseas.
(Serás amor sin tránsito
Y sin tráfico, en cada
esquina de mi cuerpo,
Has llegado a la estación de amor
(Te conocí en Marzo cosa mia!)
Alicia Pérez Hernández
-No es la pluma la que escribe es el alma-