La voz de la muerte me susurra
Siempre en gotas de vida,
Susurra siempre en mi dolor
Taciturno cuando estoy solo
Postrado en la orilla, de mis pensamientos.
De repente apareces tu, si tu,
Aduciéndome dulzura de falsedades
Y miserias de amor, después quedo
A cuestas de un silencio, tétrico
Fúnebre ya para que…
Si la noche está extendida
Sobre una alfombra de luces
Blanquizcas que tiritan
Sobre mi dolor Ya para que…
Si tu voz opaca todo mi sentir
Y después de un momento
Me duermo en la cárcel de lo irreal,
Donde te apareces a lo lejos
Y te pierdes siempre… y nunca
Nunca jamás apareces en mis ojos,
Yo que estoy en soledad lloro
Lagrimas de cristal que al caer
Al suelo se destrozan en destellos
De luz para jamás poderse juntar.
Francisco De Tescia