Salí a caminar por las calles de la incertidumbre luego que no me hablaras, y supe que la muerte es una errada percepción de la vida.
Cada momento sin ti es un cielo que se quiebra en la inmensidad de mis sentimientos.
Y hoy quiero quedarme en la puerta de tu mirada y saber qué piensas y contemplar la luz que recorre tu rostro.
Callaste sin saber por qué, quizás he herido tu corazón, pero háblame en este silencio absurdo; cuéntame de tu dolor.
Encerrados en un sentimiento desconocido, estamos abrazándonos y a la vez alejándonos.
El tiempo pasa y las cadenas doradas que nos atan aprietan más…
Doy vueltas en mi mente sin saber de tu silencio y no hago más que caer en un lecho de espinas.
Salí a recorrer estas calles de dudas desconociendo tus palabras ausentes y supe que la muerte es una equivocada realidad de la vida.
Y hoy quiero quedarme en la puerta de tu mirada y saber qué piensas y contemplar la luz que recorre tu rostro.
Doy vueltas en mi mente sin saber de tu silencio y no hago más que caer en un lecho de espinas.
Recorro mis pensamientos sin saber por qué callas y todo lo que hago es caer en un lecho de espinas, en un lecho de espinas.