Vagando entre la noche
la fosforescencia de la intermitente luz,
azul, ¡ azul !
que surge de pronto del seno del océano.
Tras lúcida luz de la luna
el mar se asida a mi piel
en su lucha de estar o huir
mientras sus olas me mecían en su vaivén
sus manos acariciando mi cabello
Ojos libres
recorriendo el infinito
…las estrellas brillan por si solas
Y el misterio que la encierra se moja
rocío que baja de la noche
humedeciendo el alma…
de acordes entregados al delirio
con el anhelo de entregarnos
y fuimos uno en el viento,...
a capricho de su olaje
…viviendo el agua,
tomándola a bocanadas
a sabiendas que no se estanca
…de paso va
¡bendita sea la vida!
entre gemidos y suspiros
…halló su destino.