Despedidas no caben en la vida,
Ya que tiene el amor un lazo fuerte,
Que a las almas ata hasta en la muerte,
Nadie puede ganarle la partida:
El despedirse no es irse, ni es huida,
Es simplemente la fuerza del fuerte,
Es la voz interna que le advierte,
Quedarse en una dulce despedida:
Despídese de la página vivida,
Quédase en los corazones vivos,
Esos que hacen su vida divertida,
Corazones que no le han sido esquivos,
Puesto que vieronle ellos florecida,
A la rosa del jardín más querida.