Cuando abres el corazón y amas de verdad a una persona,
las palabras se unen a los sentimientos y parecen tonadas de amor
que fluyen como el agua cristalina de los más hermosos ríos
No temes demostrar lo que llevas dentro,
porque sabes que la otra persona te escucha
con el corazón abierto al sentimiento
Si es que a solas quedan los enamorados,
las palabras se ausentan pues las caricias y los besos
marcan la pauta de lo que deben decirse en silencio
Lo miras, y pasan por tu cabeza los momentos
que han compartido como amigos, como amantes
como gorriones enamorados y entregados uno al otro
Ambos comparten un mismo deseo, un mismo anhelo
el amor los lleva por el mismo sendero
y será frente a Dios que verán coronado su sueño