Un minuto, un palabra, un murmullo, un soplido. Es el pensamiento, viene y se va lo concentras o lo dejas volar, puede maldecir o bendecir, puede tener sentido o no tal vez, puede mirar sin mirar, puede estar sin estar, puedes inmortalizarlo o dejarlo ir puede construir o destruir, se acelera o repentiza, a veces quieres borrarlo, aveces quieres calcarlo o quizás sacarlo.
Sale de un pequeño espacio pero puede ser como el universo, aveces lo puedes controlar y otras te controla, con el puedes llegar lejos o quizás permanecer en la mas inmensa oscuridad y abismo, cada mente es un mundo, con alguna que otra fantasía, dulce o fría, grande, necia o celebre, ahí está cada cual con el suyo. Tiene tanto misterio que sería necia si quisiera escudriñarlo todo, porque mientras mas quiero saber me doy cuenta que menos sé. OH! pensamiento mío gracias por darme el privilegio de permitirme vivir lo que nunca podré y por hacerme ver lo realmente no puedo ver, por permitirme viajar donde jamás viajaré, por razonar las cosas que no razoné, comprender aquello que no tiene comprensión, permitir trasmitir con palabras lo que no se puede ver y realizar sueños que siempre soñaré.