Todo fue tan rápido,
él se enamoró de ella,
la chica fantasiosa y soñadora,
pero ella vivía enamorada de otro,
tan ilusionada,
tan enamorada.
Como sombra él estaba a su lado;
pero mal para el corazón,
siempre quiere tener la razón,
va a prisa y no espera,
actúa rápidamente, no piensa.
Mala compañía para el cerebro,
enemigos mortales
con ideas contradictorias.
Nos hacen daño, nos confunden.
Es así como quedamos atrapados
en nuestro mundo de sueños
y conquistas muchas veces inalcanzables,
muchas veces inevitables.