Juguemos a que el amor no existe,
aprovechémonos de la confusión,
nos gusta Jugar con fuego
y pierde quien se quema primero.
Pon el arma sobre la mesa,
jugaríamos a la ruleta rusa,
pero la suerte siempre te sonríe,
tu nunca te enamoras.
Sabemos que va a doler,
pero así es este juego,
alguien siempre sale herido
y eso te debe gustar.
No juegues sucio,
las reglas ya están puestas
y no se cambian a tu gusto,
es simple, amas o no amas.
Estas muy confiado y casi te cuesta el juego,
no te importa nada, el orgullo es primero,
y tal vez tienes el triunfo,
pero esta vez me has perdido.