No te marches
tan lejos
que mi voz
no te alcanza .
y es el viento
un lobo
que no deja
de aullar ...
No te vallas
tan lejos
que la esquina
nos mira ,
como angeles
ciegos ,
que de nada
se olvidan ,
cual la copa
elevada
de una noche
fatal ...
Si regresa
en el canto aquel
pajaro blanco ,
te dira con su trino
que ese cuadro
parido sobre
el puente
de hierro ,
se ha llenado
de herrumbre
de ternura y silencio ,
y que hay tardes
de otoño
que se niega a cantar ...
Hugo López Penelas