Por nosotros su vida entrego, en sus espaldas nuestros pecados cargó, aunque mucho padeció, nunca se quejo, aquel que por nosotros murió.
Constantemente el perdón nos brinda, y paciente espera a que le aceptemos en nuestras vidas, poco sacrificios nos pide en realidad y qué se le puede negar, a aquel que por nosotros murió.
Fechas se celebran para reflexionar, recordando su mensaje que nos invita amar, un hombre sin par que a este mundo llego, aquel que por nosotros murió.
Te invito hermano a cargar tú cruz, y también a orar, igual que lo hizo Jesús, no es tiempo de llorar sino de la gracias dar, a aquel que por nosotros murió.