Es el amor cosa hermosa
que a hombre y mujer inspira
llama ardorosa de pira
intensa y esplendorosa.
Hablando de amor y amores
distintos los he tenido
diverso enfoque y sentido
soñando en tiempos mejores.
Hay amores que en ternura
son suaves y perfumados,
son los amores rosados
nacidos de un alma pura.
Los hay intensos y briosos
torbellino de emociones,
que avivan fuertes pasiones
y se tornan caprichosos.
Amores los hay inquietos
de agitación investidos,
los hay también atrevidos
solapados y discretos.
Hay quienes por amor mueren
con corazón dolorido,
penas de amor han sufrido
pero olvidarle no quieren.
Los hay también que muriendo
entre temor y desdicha,
se aferran a endeble dicha
para seguir padeciendo.
Hay amores sanadores
grandeza del alma pura,
que fulgidos en ventura
son de alegrías dadores.
Hay otros que siendo rudos
se plantan de indiferencia
y según su conveniencia
se muestran hoscos y mudos.
Existen también esquivos
impetuosos y hasta osados,
hay algunos que aún pasados
se presentan atractivos.
Hay amores inocentes
otros altivos, galantes;
de caricias anhelantes
y latidos prominentes.
Los que provocan temblores
y hacen del ánimo presa,
cuya agitación confiesa
su sonrojo y sus sudores.
Hay amores imposibles
los hay también obstinados,
amores apasionados
y algunos los hay temibles.
Hay quién sin amor no vive
aunque amar no alcanza nunca;
mas su esperanza no trunca
y a amar siempre es proclive.
También existen ingratos
célibes y lujuriosos;
posesivos y celosos,
penosos en arrebatos.
Hay amores prodigiosos
de inspiración luminosa,
que en nobleza generosa
son tersos y bondadosos.
Hay amor que a una vista
causa impacto arrollador
y en deslumbrante esplendor
no existe quién se resista.
Hay amor que va creciendo
en corazones callados;
son amores que ignorados
silentes siguen viviendo.
Amores correspondidos
otros que son despreciados,
amores agradecidos
y amores dignos de olvidos.
Hay amores que juiciosos
son cálidos y risueños;
los que incuban bellos sueños
con gestos maravillosos.
Del amor mucho se ha dicho
y se seguirá diciendo…
Es fuego eterno que ardiendo
rumbo define a capricho.
Es contraste siempre intenso,
fuelle del andar humano,
es sentimiento lozano
andando siempre en ascenso.
Habiendo amor entre amores
provistos de mil matices;
anclan en el ser raíces
para dar frutos mayores.
Amor que de mil vestidos
en cualquier rostro te asomas;
en el alma tus rizomas
percuten dulces sonidos.
Amores los he tenido
de toda especie y tamaño…
Hoy no temo a desengaño
pues amando yo he vivido.