Que lo que sufrimos
No nos impida vivir.
En los momentos de calma
Mi alma temerosa
Busca una razón,
Para estar en guardia.
Siento una presión en el pecho,
Justo en el centro del ser,
Que me atenaza la razón,
Son mis miedos,
Que habitan en el corazón
En lo más profundo, yo.
Observando un juego aburrido,
Sé que debo despegar,
Dejando atrás lo vivido.
Las olas jamás son iguales
Aunque sigan un mismo ritmo.
Ahora siento que es vida,
Tan sencilla como respirar.