Mañana cuando ya no esté
acuérdate de visitar mi tumba
no olvides rezar por mi
y déjame dos rosas en boton
Si ya no puedo escuchar tu voz
no importa… pues las avecillas
me consolaran con sus trinos
posadas sobre mi tumba
Si ya no puedo sentir tu calor
no importa… pues los rayos de sol
me abrigaran hasta el ocaso
y las hojas caídas tapizaran mi tumba
Se que me quisiste mucho, pero…
presiento que te olvidaras de mi
la flor de tu recuerdo caerá pétalo a pétalo
desvaneciendo el perfume de tu olvido
Si algún día de casualidad pasaras
Por la alameda del cementerio,
Detente un instante y reza
por mi alma atormentada
Será un bálsamo para mi alma
que vaga por las noches silenciosas
recordando, con tristeza tus tiernos besos
aquellos que endulzaron … mis noches de luna llena.