Tú dices que amas la lluvia sin embargo usas paraguas cuando llueve.
Tú dices que amas el sol pero siempre buscas una sombra cuando el sol brilla.
Tú dices que amas el viento pero cierras las ventanas cuando el viento sopla.
Por eso es que tengo miedo cuando dices que me amas, a que tengas a alguien cuando te enojes conmigo como el paraguas.
Que busques refugio de ese sol que brilla.
Que me cierres las ventanas de tu corazón.