LUCERO DEL ALBA

Reencuentro

Una mañana de otoño,

Mis alas agité al viento,

Sin rumbo, ni ostento,

Con el alma en retoño.

 

Encontróme mi destino,

Con buen humor lo recibí,

Una gran sonrisa le di,

Esperando un buen atino.

 

Fueron horas de herradura

Mi gozo se tornó amargura

mi corazón sintió soledad

mi emoción sequedad.

 

Probé la gran desventura,

En un viaje de aventura,

Volé por aires helados,

Y mis alas flagelados.

 

Tan pronto me repuse,

A mis anidares volví,

bellos cantares compuse,

y mis pasiones reviví.