Recién llegas.
Hace más de dos horas
te estoy esperando.
No eres consciente
del daño que me haces.
Dos horas esperándote...
Y llegas como si llegaras
mucho antes de la hora prometida.
Indudablemente, te burlas de mí.
Me tomas por un tonto.
Estás equivocada.
¿Dónde has estado?
No quiero pensar...
lo que podría haber sucedido...
realmente. Hasta tienes ojeras.
Hasta te has olvidado
de pintarte la cara.
¿No dispusiste de tiempo?
¿Saliste a las corridas
para venir a encontrarte conmigo?
Llegaste tarde. Supongo estarás satisfecha.
Te he esperado ardientemente.
Mi cuerpo soñaba con el contacto
del tuyo.
Pero lo que ha pasado, lo intuyo.
Hasta lo aseguraría.
No me mires con esa cara
de mujer sorprendida.
Te burlas de mí.
Y me transformas en un cornudo.
No quieras justificar tu tardanza,
con versos que no voy a creer.
Ardientemente te he esperado,
pero te aseguro me has decepcionado.
Ya tendría que estar acostumbrado,
¿verdad?. Buscas el placer
fuera de aquí...¿y el que yo te doy?...
Las veces que pronunciaste
que satisfecha quedabas...
y me dejas a mí, aquí, esperándote
para hacer el amor...
y tú quién sabe dónde has estado
engañándome... con otro...
eres una... sal de mi vista...
vete a bañar... el perfume
barato que usa tu amante, apesta...
al menos tengo el aliciente
del que a mí me regalas, a veces,
es bueno, y caro...
y a ti te agrada...
y lo hueles, y pasas tu lengua
sobre mi cuerpo desnudo
diciéndome qué bien huelo...
claro, con lo que cuesta...
vete a bañar.
Esta noche te he estado esperando
con un fino perfume sobre mi cuerpo...
el que a ti te gusta...
cuando termines de hacerlo,
ven nomás, no te vistas...
llega a mí desnuda,
desnudo a mí me encontrarás...
y te haré lamer todo mi cuerpo,
como a ti te gusta hacer...
y te he de demostrar,
que soy mejor que el otro...
que te montó...
Todos los derechos reservados del autor ( Hugo Emilio Ocanto - 08/04/2013)