De las caricias bebe todo el cariño
por esas palmas vagan sus dos mejillas
se siente adormecido como los niños
que acurrucados quedan en las rodillas.
Ama favorecido cada mañana
con la felicidad de los que se inspiran
con un aire de eucaliptus a bocanadas
y una mirada verde que se respira.
Suena, resuena y vibra, vuela y se esparce
labio del viento, cuerda que afina amores
de su boca los besos van de colores
a esa cueva de cielo para que estalle.