Junior Rafael Velazquez Leon

El crimen

Ni el mismo sabe cómo fue. Entonces quien sabrá en cual punto del cuándo y del donde la habrá dejado tirada. Quizás, se le cayó por algún hueco del bolsillo. Quizás... la dejo caminando en la calle, en una misa de domingo o en alguna lectura de Darwin; tal vez -no lo sé y él tampoco lo sabe- alguien se la habrá robado o estará mal parada en la niñez o la adolescencia. También, puede ser peor. Puede, que dormido y sonámbulo, sin darse cuenta, el mismo la haya asesinado y mutilado; puede, que él la haya devorado y defecado de ha pedacitos. Todo es posible, él no lo sabe y yo tampoco. Nadie sabe... que fue de su fe.-El crimen-

 

Junior R. Velázquez L.
29.03.2013