Tendría que tener las manos sin huellas
Para poder decir que he olvidado
destrozar el pasado, quedarme sin memoria
para que el alma no se ahogue en gritos
de dolor desesperado.
Vago entre escombros humeantes
Y cada paso que doy es un tropiezo
Se calcinan mis ansias pierdo ilusiones
Me entrego a la tristeza fiel compañera
De mis aciagas horas, de mis vacías horas.
Quiero sacar de mi alma, de mi sangre
Esto que me está matando
Pero imposible tarea, si hasta en mi piel
Están tatuados hasta los más mínimos contactos
De su piel, de sus caricias, de sus besos…