La mesa de noche allí está, me acompaña
Cuando en desvelo escribo poemas por
Consuelo, en ella medite y junto a ella
Aprecie más de un amanecer.
La cargo y la recargo, sobre muchas obras
Voy meditando, fue entre muchos bienes una
Buena adquisición, sobre ella he aprendido más
De una lección.
Algunas ocasiones sobre ella descanso los pies
En verdad me hace muy bien, en todo hogar
No debe faltar, no se trata, que va, de un adorno
Más.
La mesa de noche, pasa las noches en casa unas
Veces acompañadas otras veces sola pasa, en el
Mismo lugar la conserve desde que la compre, vaya
La verdad es que me hace muy bien.