Te quiero desde siempre y sin saber
que he vivido, por ti, entre sueños,
sueños que se intercambian por inspiración;
un quejido´ que se lleva el infinito…
... Y este querer mío es el ideal, la utopía del varón.
Pero yo te quiero a ti, que no me quieres,
Pero me sigues soñando, quizás, hasta en otros brazos…
Te quiero porque te espere toda esta muerte,
porque me desangre el corazón buscándote,
buscándote por las calles donde transitan los derrotados.
Te quiero porque pase las noches en vela
Poniéndote rostro y ninguno se acercaba a la sonrisa de tus ojos.
Nadie llego tan tarde para amar ,ni tan pronto para olvidar,
Ni nadie se encargo de mi vida conquistándome como tú sabes.
Te quiero en el dolor,con el dolor que me provoca quererte
Porque luchan,sin tregua,los sentimientos y la razón
Y como tú, ya lo sabes, siempre pierde las entretelas…
Te quiero con el grito, con el silencio de la blanca arena
Donde las gaviotas dejan sus huellas camino a la mar,
Te quiero en esos golpes de olas que miramos los dos
Que nos sacude de esta cascara de coral con la que nos vestimos.
Te quiero,ay,ay,ay como te quiero…
…Y hay tantos poemas vestidos de sal…
Poemas desesperando tus ojos,tu sonrisa, tu voz,
Tu música…ay tu música …
¿En qué Luna estará?
Yo te quiero, te quiero en mi luz, en esa vela que nos espera
Testigo de este desencadenar de manos quiméricas
Que danzan por el espacio que no respiramos, que nos pertenece.
Te quiero con fuerza, con paciencia, con tolerancia
Y en mis narcosis con esa ternura apasionada con la que yo sé amar.
Antonia Ceada Acevedo