Blas Roa

El ángel y el poeta.

"Tornábase muy vacío, en lo alto el alto cielo

de allá un ángel vino en agüero a buscarse una novia

a esta Tierra que es hotel de sorna

y a un poeta le pidió consejo"

 

En el camino algo viene

distingue el ángel al ver

que frente a él en tropel

un poeta se detiene:

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es tan ángel como yo

me dirá qué se le dice a la mujer

me enseñará a ser feliz

y de aqui me iré a París

a pasar luna de miel. 

 

Ángel:

¿Eres tu aquél poeta

que enamora con su trova

a señoritas y señoras

como Bartolo y su trompeta?

 

Poeta:

No señor, se equivoca:

No soy mas que un atleta

que dimite de las bodas

que a las mujeres adora

y mas bien usa corneta.

 

Ángel:

Decime pues, Poeta

cuál de tus vidas recibiste

de las mujeres que desvestiste

cubiertas antes en pana y seda

y si no tienes respuesta

no soslayes si perdiste

si de responder te resistes 

te veré desnudo en la coleta.

 

Poeta:

No me guardo la respuesta

ni la doy así muy fácil

tu pregunta es un oasis

en parlamentos de arena

Si me compras la letra buena

la mala te la dejo gratis

esas vidas las recibí con lápiz

ilustrando la luna nueva.

 

Ángel:

No entiendo yo de lunas

ni de mujeres tan ajenas

tu y yo en la verbena

somos un jardín de tunas

Tu palabra por oportuna

es la mas retórica saeta

que aunque sean color violeta

no son mas que amargura.

 

Poeta:

No conozco de tal ruptura

entre el guión y la letra

si el amor fuera una tetra

no lo veo ni en pintura

Para hablar de amargura

hay que llevar la vida lenta

es fugaz la mirada perfecta

si no hay amor en su tintura.

 

Ángel:

Explicáme pues, Poeta

cómo enamoras con altura

a mujeres de envergadura

en tus rimas de profeta 

yo no logro ni con cometas

elevar la mas alta hermosura

me asemejo a la tristura

del que muere bajo glorietas.

 

Poeta:

No te desanimes, colega

total que ángel no enamora

en ellos no se envalentona

la cruel espuela de la letra

La mujer posee un delta

en el vértice de su pandora

de los ángeles la mazmorra

donde el pecado se condensa.

La mujer no tiene conciencia

para hacerle ojitos de coqueta

a un ángel que del cielo venga

a pretender sus labios de gata ladrona.

 

Ángel: ¿Y cómo le haces?

Poeta: gasto en vino y par de ases

Ángel: ¿Y te funciona tal postura?

Poeta: Pa´qué te miento, poco dura.

 

Aun así, aquí me ves

muriendo mientras escribo

el amor es juego de vivos

de eso no saben en el cielo

pero para darte un consuelo

sin corromper tu oficio noble

sin que la conciencia me estorbe

te diré lo que es bueno:

Mira cómo la pasa el diablo

que quiso ser lo que vas tramando

pidiendo consejos de rima y letra

mejor cabalga en tu bicicleta

de vuelta a tu vecindario

Que el diablo ahora es diablo

por querer hacerse el poeta. 

 

"Y dicho esto se fue el ángel

sumido entre sus pensamientos

resumiendo que el amor es cuento

mas allá de los abecedarios 

y no queriendo deshojar calendarios

compró boleto de vuelta al cielo." 

 

Blas Roa