ivan rueda

ELLA

                                                                         " A mis compañer@s de poesía "

 

Ella vive mientras duermo

en la casa de mis sueños,

en un palacio de oro

más hermoso que en los cuentos,

ella viene a visitarme

en un caballo de palillos

y me ofrece con sus manos

amapolas sin sentido

cuyos pétalos de espuma

son azules como una ola del mar.

Puede trepar a la luna

a través de un hilo blanco,

puede subirse a las plumas

del más bello de los gansos

y en sus ojos verde uva

se reflejan los remansos

de los ríos que se paran para amar.

Hay en su voz un acento

que no es de este mundo,

un aullido del silencio

del abismo más profundo,

el lenguaje de una sombra

exiliada de Mercurio,

el dialecto de una rosa

que se ahoga en un estanque,

el rumor de esos días

que no tienen almanaque

cuyas hojas nadie puede arrancar.

Ella cura mis angustias,

pone paz a mis batallas,

le da luz a mi penumbra,

me entristece cuando calla

y cuando apenas se desnuda

yo le robo sus palabras

como un niño golosinas

en la tienda de la esquina

mientras su madre se enfada

por lo cara que es la vida

con un viejo usurero

más miope que un cero

que solo piensa en su barriga

y en montones de dinero

que en la tumba jamás podrá disfrutar

A pesar de tantos años,

ella sabe que la amo

como un niño a su cometa,

como un loco a su locura

como el viento a la veleta

como un fraile a su tonsura

como el jazz a una trompeta

que en la noche más obscura

nos invita a sentir para soñar.

Ella escribe mis poemas

como la aurora el horizonte

como la lluvia en las aceras,

como el rayo en el monte,

como el viento en la arena

cuyas huellas otro viento ha de borrar

Pero si un día se muere,

arrancadla de los libros

y enterradla en una playa

de camino al paraíso

como aquel loco de adarga

cuyo cuerpo sin juicio

en las tierras de la Mancha

nunca nadie ha podido encontrar.