Por fin la tormenta
Me trajo el conocimiento.
Conocí los placeres, las tristezas y los desdenes.
Ya no hay nada por conocer,
La vida es una planta, una flor o una piedra dura.
Nacimos para morir
No vivimos para otra cosa.
Es el fin de nuestra existencia.
Hay quienes aman
Quienes se olvidan,
Hay quienes quieren
Y hay los que nunca lloran.
Los locos y los idiotas,
Los inteligentes y los que nunca aprenden,
Pero todos, todos…
A la tierra vuelven,
De donde no pudieron escapar jamás.
Tarde o temprano compartiremos la misma mesa
Con la tierra y sus gusanos.
¿Por qué no antes que después?
La vida es un libro inconcluso
Que sin deseo se concluye.
Quiero ser quien concluya mi historia
Quiero ser quien concluya las obras
Y que después no conozca el final,
Que no sepa si el mar se comió a la tierra
O si la tierra se tragó mi corazón.
Estoy triste y estoy cansado.
No quiero un libro que me enseñe,
Sino uno que me haga olvidar
Lo que he aprendido
y que no me deja descansar.
Héctor Humberto García Herrera