No soy ningún santo. Pero tampoco un diablo
No rompo corazones, pero tengo el mío roto
Por eso busca al ángel que lo reponga
Sin pedirme nada a cambio, sólo ser amada.
Te prometo alegrías, pero no evitarte penas
A pesar que lo quiera con todas mis fuerzas
Porque parte del aprendizaje es sufrir
Cuando se necesita amar para vivir.
Ven conmigo, amemonos sin miedos
Dejemos atrás todo lo malo del mundo
Creemos nuestras propias historias
Sin importarnos el futuro de nuestras lágrimas.
Adelante. Todo eso podremos y más
Si nos empezamos a preocupar por la fantasía
Ya que la realidad nos ha alejado suficiente
Para qué nos cueste encontrarnos este presente.