Hay mañanas en las que despierto con las ilusiones rotas, con una sonrisa fingida y con los sentimientos empolvados...
Pero después me viene tu recuerdo y me otorga una razón para que vuelva a reír
Hay tardes en la que el tiempo viaja lento, la realidad golpea mi cara y el sol incinera con colera todo intento mío de esbozar una sonrisa...
Sin embargo y sin saberlo tu nombre aparece dibujado entre las nubes y atenúan mi dolor
Hay noches en las que la oscuridad regresa a reclamar este corazón, la luna me hipnotiza y el frío congela mi imaginación...
No obstante una musa aparece al otro lado del cristal y con su encanto reaviva una chispa de ternura que escapa por mi mano y transmuta en un verso
Hay maldad y hay luz,
hay blasfemias y hay cumplidos,
hay falacias y hay verdades
Lo que no hay ni remotamente... son mentiras en lo que escribo