Cuando el silencio se rompe, quedamos desarmados. La desnudez del amor, se pinta sobre esta soledad errante y se roba del tiempo, la última coraza.
Te amo
La ruina poética de mi sueño,
eres tú.
Tú a mi lado en este espacio del mundo
que no nos pertenece, pero acogemos
en la sencilla entereza de sabernos
nadando en la sangre
que se violenta y ensancha
en los cadáveres del viento
-no nos conocen-
Me has desnudado en tu mirada
has bautizado mi espíritu
por los siglos de los siglos
en el mapa tántrico
de tus manos nocturnas.
Nos hemos amado desde antes
en la lágrima que lloraba
la pupila enferma de otroras despedidas,
en el pañuelo de seda aglutinando
la alquímica fragancia,
geografía de tu instante
Nos hemos amado ciegos,
desesperados
guardando el te amo
en cada acto que nos acerca
y nos deshace
en las partes de nosotros
que no conocen nuestros mares
Te amo
para gritarlo, me fugo de mí
y me libero contigo
hago de la realidad
ese dominio apartado
y ajeno.
-Desconocido-
Eres mío, en mí
a todas horas
qué me importa
si el cielo y la tierra
saben que -esto- que somos
en la luz incórporea,
es abono de incandescencia.
Tú y yo
aquí y ahora
somos esto.
La dermis exiliada al peregrinaje de sus sombras