marco augusto

Como una estatua sin brillo

 

 

Perversa se fotografió la tarde

en el bronce amarillo de mis recuerdos,

cuando su cuerpo inerte

fue a detenerse eternamente

en la tumba fervorosa

de mis nostalgias.

En hambres de noches sin luna

se plantó mi vida,

como un estatua sin brillo,

dentro de una jaurías de bellos recuerdos.

Sonámbulas marchan las horas,

mientras sigo refunfuñando,

que esto no es cierto.