Peregrina

PERDON

 

Ha llegado el otoño,

ya nada se puede hacer,

lo que antaño no podía

viene ahora a comprender.

 

Preguntas que se hacía,

hechos sin entender;

cómo de niño veía

el cotidiano acontecer.

 

Escaso su entendimiento

en su inocente niñez

era claro el sentimiento

y percibía la insensatez.

 

Ese entorno de incongruencia

donde el bien hasta hace el mal 

fué dejando fuerte huella 

profunda de insanidad.

 

Pero en su naturaleza 

que le fué dada de allá 

fortaleza interna tuvo

que le hizo perdonar.