Siempre estás en mí, aunque al estarlo, sea un pecado.
¿por qué un pecado?
Porque una vez más, te lo digo: nunca podrías llegar a ser totalmente mía.
Nunca significa nunca... amor significa amor, igualdad de sentimientos...
¿Libre yo? Tal vez, depende de las circunstancias, de la convivencia, mi recíproco amor hacia la mujer que amo.
Ella pide la libertad, y la obtiene. Yo quiero ser libre, y ella me abre la puerta... y yo remonto con mis alas imaginarias, por los aires, por la libertad, por la individualidad, por salir del encierro, por eludir el compromiso de la constante esclavitud que las parejas nos comprometemos cumplir.
El amor es algo maravilloso, siempre pienso así, que lo es. Pero el sí del altar que pactamos debe ser sí... para toda la vida.
Algunos los cumplen, otros no. Es la vida, son los sentimientos. Son la autenticidad del amor que deseamos tener a nuestro lado.
Sobre todo, tener eterna fidelidad. ¿Cuántos de cien parejas somos fieles? Algunos, no todos. Antes, en otras décadas, sí, más fidelidad existía. Por prejuicios, por el qué dirán, por los hijos, por conveniencia... y por decencia... en esta era, todo ha cambiado, hasta los sentimientos eternos...
Ahora son promesas que invocamos y no cumplimos... la fidelidad, esa, la que siempre tendría que existir entre dos seres que se aman, pero para siempre.
Sin límite, sin tiempo, sino eternamente.
Y hoy en día, muy pocas parejas perduran eternamente con la promesa hecha delante del Señor... nuestro Dios... los tiempos han cambiado. No solo en el amor, en todo...
La tecnología avanza a pasos agigantados, la ciencia, los seres prodigiosos... pronto hemos de tener vivienda en la luna...
Pero las injusticias crecen más y más, la pobreza, las guerras entre nosotros mismos, los habitantes de este planeta tierra. Los tiempos pasados, pasados están... pensamos algunos que han sido mejores que los actuales. Algunos están de acuerdo, otros no.
El mundo está lleno de miedo, de pánico, de disconformidad, de robos, de crímenes, de inhumanidad... pero buena gente existe, a la cual no se le da la oportunidad de demostrarlo, para que este sea un mundo mejor.
¿Qué es lo que estoy diciendo?Lo que pienso. Solo lo que pienso.
Juntemos nuestras almas. Unamos nuestros sentimientos para acompañar al que desamparado está. Es terrible lo que en el mundo está ocurriendo...
Y nosotros somos parte de esos terribles seres... existiendo excepciones. Muchas.
En realidad, he pasado a otro tema. Porque mi deseo de amarte es tal, que no tienes idea hasta qué punto llega, esta, mi locura de amarte... que nuevamente te repito... nunca he de lograr tu amor... pero tú sabes lo que siento yo por ti... y también yo se lo que sientes tú por mí... rechazo, un rechazo total, el cual me lastima el alma, y al mismo tiempo me hace admirarte porque eres la esposa perfecta... para el dueño de tu corazón...
No soy yo tu elegido... soy yo el que te ama, y esto, me hace feliz... y hace llorar a mi alma, porque tú, no me amas. Lo se, me lo has dicho.
Pero mi alma insiste en sentir lo que siente, sabiendo mi mente que está errada, que está equivocada.
Imaginariamente, dejo de volar... Mis pies tocan tierra, estoy en mi mundo real... Estando en el aire, todo es tan distinto... me hace soñar que lo que tanto deseo, lo tengo, pero no es así.
Nuevamente, debo aceptar mi realidad, la que está aquí, sobre la tierra. Debo bajar mis sueños del aire... ese, que refresca mi rostro y despeja mi mente, que me libera de una realidad de la cual quiero evadirme, pero, no, evadirla no puedo.
Evadirla no debo. Seguir con lo que el destino me brinda... sonreír ante la vida y el mundo, y por pudor, esconder este llanto interno que me ahoga...
Todos los derechos reservados del autor( Hugo Emilio Ocanto - 21/04/2013)