EL VIAJE
Te amé en el silencio
En cada gemido que desprendías
Donde yo soñaba en devorar tu aliento.
Amé tu valor y tú decisión
Ame nuestras sonrisas de idiotez al no saber que decirnos.
Amé tu inteligencia y habilidad
Para esperar al enemigo en batalla
Hasta el último momento
Amé tu piel y tus ojos
Tan, negros como las noches sin luna
Que desprendían pasión…