Parece imposible vivir bajo esta tormenta;
en este despertar del sueño, en cada día,
convertido en pesadilla hasta volverse a adormilar.
Es tan increíble lo que el alma inventa
sólo para alargar aún más esta agonía,
este engaño de bobos que es la vida: no es más.
Parece imposible...pero nadie escarmienta,
y seguimos en la rueda y la rueda en la vía
de este tren a punto de descarrilar.