1825 días sin verte,
sin oír tu voz, sin acariciarte.
No te tengo.
nunca te tuve,
pero algunas veces pude sentirte.
Extraño los días en que me dabas 12 horas de tu tiempo.
estabas cerca de mí,
aun sin importar que estuvieras con alguien más.
Extraño los días en los que solíamos caminar
jugando nuestras manos
y riendo sin parar.
Las veces en que te decía prefiero un café
en vez del cine, para platicar más.
Los días en que te preguntaba
¿y me quieres? Solo sonreías,
nuestras miradas hablaban por si solas.
Y te preguntaba de tus amores,
andabas con alguien más
y no me importaba estar contigo.
Maldita la luna que nos dejó en el olvido,
maldita porque siempre te ve,
camina contigo.
Mis días son rutinarios desde que te fuiste,
nunca dijimos adiós, sentíamos algo más que amistad
y nunca lo dijimos.
Sabíamos que no podía ser,
que lo que hacíamos estaba mal
y sin embargo nos amábamos a nuestra manera.
Y te amaba,
lo suficiente como hoy,
como hace 5 años de tu partida.
Siempre estoy pensando en ti,
en nuestro pasado,
eres tan tangible en mis sueños.
¿Dónde estás?
No encuentro respuesta,
hace un tiempo platicamos,
me invitaste a salir, pero no coincidimos.
Te he escrito,
preguntando sobre ti, sobre tu vida
y no hay contestación.
Estar sin ti, es como un escalofrió
como si la muerte me tuviese
atrapada en vida.
Y te amo,
quizás mas que ayer, que mañana.
te amo, pero no estas.