Como una visita inesperada...
sin avisarnos, sin saber por què
invadiste la ciudad, los barrios y moradas
cubriendo con un manto negro nuestra fe.
Te llevaste vidas, historias y recuerdos...
ahogaste risas, juegos, arco iris por nacer
y sentimos miedo, dolor, desesperanza,
que nos dejò a todos un lamento cruel.
Las huellas no se borran facilmente,
solo el tiempo las puede mitigar...
¿Còmo hacer para reconstruir nuestro camino?
¿Cómo hacer para que no pase nunca mas?
Pidàmosle a la lluvia que recobre su pureza
pidàmosle a los campos un verde resplandor
para seguir sembrando en la Bendita Tierra,
para seguir luchando por una vida mejor!