(Soneto)
I
Bebí allí en tu boca fuente serena
El néctar del puro y afamado amor
Y entre brasas de pasión, que quema
Ardió así mi pecho; ¡en tu gran calor!
Baje allí junto a ti miles de estrellas,
Caminé de tu mano hacia Orión.
Y en el aura viajaron nuestras huellas
Férrea fuerza que gravitó con ardor.
De romances bañamos cordilleras,
Y en volcanes brotó esta gran pasión,
De cenizas y, ardientes quimeras.
Lamimos de la tierra sus sonrisas
Yen el deseo de dar el corazón,
Nuestro amor se pasó como la brisa.