¡Qué extraña forma de amar!
de aquellos que hacen sufrir
maltratando un corazón
en nombre del dulce amor!
Y qué criterio feroz
quien castiga sin piedad,
enterrando la confianza
en lo profundo del mar,
ahogando las esperanzas
de un amor en libertad!
Provocando esa inquietud
que se asemeja al terror…
sumiendo en hondo silencio
largas horas de dolor,
perdiendo la fe en sí mismo,
caminando hacia el abismo.
Porqué se mata al amor
y se borran las sonrisas?
Porqué gana el desamor
transformando el viento en brisa,
el fuego en llama ligera
diluvio en lluvia sumisa?
¡Qué extraña forma de amar!
quien utiliza sus manos
como espadas, como clavos
en lugar de acariciar.
Y lo mismo aquel que usó
sus labios para humillar…
pues han sido concebidos
tan solo… para besar.
¡Qué extraña forma de amar!
quien no respeta al amor
matando las ilusiones
que un día fueron de a dos,
destruyendo paso a paso
el latir de un corazón.
¡Qué extraña forma de amar!
de ese ser al que yo he amado
y ha dejado en mi pasado
solo angustia y soledad.
Alicia Santi