MANOS
Mira tus manos, cada raya son parte de tu rostro mudo
Cada línea son tu presente y pasado y estigma que se bifurca
Necio portal dactiloscópico, latidos de corazón lleva
De caras y banderas tercer ojo que en su reflejo la arena de ayer queda
Espectro de mendigo consejero cuando las miras, te dice:
Esto memor (RECUERDA) cuidado del árbol refulgente
Las ramas que mas brillan son las que velozmente te tumban y te hincan
Abanico vaporoso, veo las olas de nueva esparta
Cuando iba en la popa del barco mirando el peinado de la noche marina
Y mis manos, la lumbre que tuteaba con el deseo
La bandera del fuego que estaba izada en el vientre
De una escurridiza extranjera
La que resbalo por la campana del pubis libertino
O la que sin desprecio levantó de la hez insidiosa
Al mejor amigo, pero las manos siempre están sucias
Porque el agua viene de los ríos, donde los guitarreros tiran sus versos
Los jabones solo tienen aromas pero no purifican nada
Todo lo baboso es efímero por necesidad corporal
Por ti desliza el lenguaje del corazón,
Manto que cubre el rostro del infante acurrucado en un rincón
Porque tumbó el jarrón de bronce tan cuidado por la abuela,
Porque le falta el pan, o porque nunca ha visto a su madre
Y al guerrero que endilgo la insurrección para expiarse
De un gobierno carcelario
Pero ya, están viejos… la hoja se ha arrugado, trémulos abanicos
Que piden el posillo del orín o la tasita del café
Y el sistema decimal aparece para cobrarnos los años de la hipoteca de la carne,
El cuervo desdentado en la vereda del sueño aguarda,
Ya no hay montañas ni pedruscos que alcanzar, el réquiem canta al aire,
Desciende que viene el sepulcro y la trompa inmunda del tiempo
Repto su avaricia de ramera en tu existencia
Como un vino que extinguió en todas las bodegas
JAMBAL