nata moreno

ENTRE

entre la presencia y la ausencia del pensamiento 
estamos tu y yo 
convertidos en un idioma poco legible 
convertidos en simbologias,
atrapados por las paredes y 
envenenados por los jugos gástricos
nos damos cuenta que la fatalidad 
de nuestro destino esta en habitar 
en el umbral del laberinto 
donde el andar es escabroso
cuando antes de ser mariposa se 
es apena oruga y donde
las alas se despliegan 
con el veneno breve y efímero 
y solo nos queda por recordar 
que durante tres días de vuelo 
tanto ella como el 
se funden con su misma eternidad 
entendiendo que no hay un 
instante en el día y la noche en que 
ellos sean uno mismo