Coty

Alma Mater

 

 

Verde valle de juventud

testigo de adolescencia

cuántos relatos guardados

tras esos muros de piedra.

¡Setenta y cinco años de historia!..

Dios te conceda muchos más

para sumar a tu gloria.

A sol ardiente y trabajo duro

esta bendita tierra Yeguare

forjó templanza para  el futuro

las manos encallecidas y la piel curtida

fue un pasaporte para la vida.

¡Mira cómo se riega esa simiente

por toda América y otros continentes!.

Y es que hacer parir a la tierra frutos

no es trabajo, ni fácil… ni para muchos

pero nos diste mucho más que eso

nos diste las herramientas

para bregar por la vida

el “Aprender Haciendo”

fue la mejor doctrina

y el “Labor Omnia Vincit”

la mejor consigna.

Todavía quedan restos de memorias

de vivencias, alegrías y tristezas compartidas

noches de desvelo, tubo intenso  y  perras entretenidas

La angustia de la prunia

fue el imán para las faltas

sobrevivir a la disciplina

¡esa sí fue una  gran hazaña!

y no digamos la pelea

de aceptar a las arañas.

Pero todo eso es lo que marca

Y te hace más hermano

y te hace erguir la frente

para  decir a voz en cuello

¡con orgullo y a mucha honra!

¡soy y seré siempre…. ZAMORANO!