Eres amor candente,
que a mi vida llegó tardiamente,
trajiste contigo,
simientes nuevas, de mil colores,
que sembraste,
en el olvidado campo de mi vientre,
para que en mi vida florecieran
ilusiones placenteras.
Araste con caricias de tus manos,
mi piel entera,
y en cada zurco,
hecho por la magia de tus dedos,
renacieron sensaciones nuevas.
Sacias la sed,
del desierto de mis labios,
con lluvia dulce de tu boca.
Recorres con pasión,
mis montes, llanuras y veredas,
dejando tu aroma cual brisa ligera.
Tus ojos son hermosos luceros,
que brillan en mi vida,
como dos luciérnagas,
de amor encendidas.
Tu sonrisa son rayos de Sol,
que prodigan a mi alma,
el calor que necesitan.
Con la frescura y el ímpetu de un río,
bañas mi alma de deseo ardiente,
y en cada latido, mi corazón te grita...
que también te desea, y..
!!!!que te amará por siempre!!!
Claudia Alhelí Castillo
01-05-13