Mis pasos lentos
aplastan las hojas secas,
que el otoño a cosechado del viejo roble.
Ya no es el mismo de antes,
sus hojas escaparon danzando
con los musicales movimientos del aire;
sus ramas parecen ya muertas
abrasadas por los rayos solares.
Ya no es mas bello
ya no es mas lindo
ya no es el mismo.
sus lágrimas secas
han tapizado el suelo que yo ando,
y mis pasos tristes salpican el charco de a lado.
El sonido de las gotas convertidas en olas,
va cortando el silencio con sus tijeras afiladas,
los perros ladran el paso de un alma herida,
y el viejo roble acurruca mi vida triste
con el ultimo suspiro que ya no tiene.