He llegado a este mundo imaginando tu ser,
ideando tu figura, pero mi mente no ha de formar
una descripción tan maravillosa.
Porque no me he de conformar con tan solo esta
descripción inconclusa?
Si para mi esta pequeña ideología tuya provoca
en mi los sentimientos más profundos.
¡No!
Pero mi corazón no se resigna al hecho de no
poder llegar a tenerte en mis brazos, rozar tus
labios de miel, sentir tu sutil aroma, el solo anhelo
de llegar a reflejar tus ojos en los míos hace que
mi corazón se sumerja en un éxtasis infinito.
¿Dónde te puedo encontrar? ¡es lo que no se!,
tan solo eres una ilusión inconclusa, un sueño, que
me hace feliz pero al la vez me atormenta.