julio de guernica

Déjame

Déjame perfumar mi madrugada

en las gotas de miel de tu rocío,

que se llene mi cántaro en tu río,

y me queme en el sol de tu mirada.


Da refugio a mi Amor en tu posada,

acoge mi pasión en tu bohío,

aprisiona en tu abrazo mi albedrío;

sé el principio y el fin de mi jornada.


Haz que estallen en mi alma, los luceros,

que llevas en los ojos encendidos;

estremece mi piel con tu latido,


y mitiga mi sed en tu venero.

Que todo mi universo ha florecido,

por la locura atroz, con que te quiero...